Los orígenes del racismo en la Republica Dominicana...
Actualmente se podría decir que el dominicano tiene al negro en la frente.
Es imposible hablar de racismo en La Republica Dominicana, sin antes entender la historia detrás de nuestra estructura social.
El racismo en Santo Domingo es un fenómeno muy especial. Es un problema mas bien de identidad. El negro dominicano se negrea a si mismo y no se considera negro. Es una fortuna para un negro casarse con una persona de piel más clara porque así mejora la raza. Por lo regular, un negro que goza de una buena posición económica escoge una blanca o piel clara para esposa, por que le da prestigio. El casarse con uno más oscuro es atrasar la raza.
Negro es sinónimo de feo y pobre e inculto y desdichadamente también de haitiano. Afortunadamente estos prototipos han ido cambiando a través de los años.
Pero en realidad todo esto es pura teoría entre las personas pobres y de clase media. Solo las familias tradicionales de la alta sociedad mantienen las barreras de separación racial donde es un pecado capital mezclarse con gente diferente.
El racismo en Santo Domingo se caracteriza también por ser anti-haitiano. Esto tiene que ver con las condiciones infrahumanas en que viven los braceros haitianos a quien le debemos que nuestra economía siga en marcha. Estas personas son rechazadas mas bien por su pobreza que por su color. También el anti-haitianismo tiene que ver con que la independencia dominicana se libro en contra de los haitianos los cuales están tan cerca y cada vez mas cerca con el flujo masivo de haitianos por la zona fronteriza. Y yo iría aun poco mas lejos, las palabras de Boyer se están convirtiendo en una realidad cuando este dijo que la isla era una sola e indivisible y que seria Haití. A través del tiempo el dominicano se caracteriza por una piel mas y más oscura, convirtiéndose en un país de población predominantemente mulata y negra.
Cierto es que la mayoría de los negros dominicanos no tienen una procedencia directamente africana, sino que han sido emigrantes llegados de otros países y colonias donde el negro es literalmente libre, como es el caso de Haití y las Antillas Holandesas. Algunas veces estos son personas con cierto nivel de educación, que se abren paso poco a poco primeramente como trabajadores de ingenios y luego como pequeños comerciantes.
La mezcla racial entre negros y blancos en nuestro país es impresionante.
En nuestro país afortunadamente el odio racial es inexistente. No creo hayan muchas personas dispuestas a formar filas en El KuKusclan o cualquier otra organización semejante. No existen barrios de negros y barrios de blancos como en otros países. No existe el temor de entrar a una zona y ser golpeado o robado por el color de tu piel.
Los negros tienen plena libertad de participar activamente en la política y contar con el apoyo del pueblo. Muchos podrán decir que Francisco Peña Gómez no llega a ser presidente por el color de su piel. Yo estoy en completo desacuerdo, lo que lo alejo de convertirse en gobernante fue lo dudoso de su origen. Las circunstancias especiales que rodearon su nacimiento nos hacen verlo como un hombre de doble nacionalidad haitiano-dominicano.
Son muchos los negros famosos y queridos del pueblo, yo diría que tanto o más que blancos. Por solo nombrar unos pocos, esta el caso de Sami Sosa que más que un ídolo es un héroe ante los ojos de los dominicanos, también, Jhony ventura y tantos otros.
En nuestro país bien se sabe que la herencia del indio taino es casi inexistente comparándonos con otros países latinoamericanos. El Indio taino fue prácticamente exterminado por el maltrato y trabajo duro a que fue sometido por los colonos españoles. A esta tragedia también se le agrega el suicidio masivo que ellos cometieron en su resistencia a vivir bajo el jugo que les substraía la vida.
Son muy pocos, por no decir inexistentes, los rasgos indígenas en nuestra población.
Por otro lado la identidad dominicana realmente comenzó cuando la colonia española se separo por primera vez de la madre patria. Esta colonia conocida como El Santo Domingo Español estaba formada básicamente por individuos de raza blanca.
La presencia del esclavo en la parte española era mínima. Esto se debía a que la principal actividad económica en esta parte de la isla era la cría de ganado, lo cual no era trabajo pesado y el otro factor fue la pobreza en que vivieron los ciudadanos de esta parte de la isla durante el periodo de la España Boba.
Muy por el contrario, en la parte francesa de la isla el flujo de esclavo era descomunal. La principal industria era la industria azucarera, la cual necesitaba trabajadores fuertes que cortaran la caña de sol a sol. Que mejor que los esclavos africanos para tan ardua actividad. Esta colonia se caracterizo por ser la más rica durante el gobierno Napoleónico.
Los negros esclavos llegaron al punto de apoderarse de la parte francesa y declarar la independencia de Haití como un país soberano y negro desalojando a los franceses de su territorio.
En 1822, poco tiempo después de la independencia efímera (Cuando por primera vez El Santo Domingo Español se separa de La Madre Patria), Haití invade la parte dominicana bajo el mando del General Boyer. A partir de ese momento se declara la abolición de la esclavitud en territorio dominicano.
Los veintidós años de dominio haitiano cambiaron el perfil de la sociedad dominicana. La mezcolanza racial se acentúa. El Negro es el hombre en el poder por veintidós años. La columna de la economía dominicana pasa a ser el azúcar.
Al declararse La Independencia Nacional en Febrero de 1844, se rectifica la igualdad de derechos no importando el color de la piel. Tanto así, que el segundo hombre en la junta central gobernativa (movimiento que dio origen a la declaración de independencia) fue Francisco del Rosario Sánchez, de condición mulata.
A partir de entonces, el negro ha estado presente en la historia y en la vida social dominicana, no como un alienado sino como parte integrar de nuestra sociedad.
La industria azucarera demanda trabajo pesado, brazos fuertes, y por esta razón La Republica Dominicana siempre ha favoreció la inmigración de trabajadores de caña provenientes de países menos afortunados, como lo ha sido el caso de la emigración haitiana, y el caso de inmigrantes de las Antillas Holandesas. Esto, a través de los años dio origen a colonias de ingenios de población negra que poco a poco se fueron integrando y mezclando de una manera tal que la población dominicana se conoce como mulata y mestiza. La pureza de negros o blancos es casi ficticia. Fue muy popular en los años 40 el refrán de "Los dominicanos tenemos el negro detrás de la oreja."
Actualmente se podría decir que el dominicano tiene al negro en la frente